martes, 22 de octubre de 2013

Apariencias

APARIENCIAS

Mirando mi reflejo
en un espejo
me acerco poco a poco
a mi mirada,
y sin darme cuenta
voy llegando a tus ojos,
esos que me buscan y reclaman.

Mirando al cielo
el azul transparente simula 
al ancho mar.
Aparenta ser lo que nunca
ha sido,
lo que nunca será. 

Sin dudarlo me pierdo
en él, 
pensando que era infinito,
navegando en tormenta,
confundiendo el cielo. 
Pero este llega
a su fin, 
se corta y me lanzo al vacío,
perdido en el horizonte,
rompiéndose en una lágrima,
cayendo al silencio
de tu alma.

"Tocado y hundido"
pasa a ser mi lema,
pues llego a los rincones
perdidos de tu corazón,
donde yacen tus deseos,
sentimientos escondidos,
lágrimas con las que ahogaste
tu dolor.

Y ahora me ahogan a mí,
siendo testigo de esos
segundos perdidos,
minutos desperdiciados,
horas sin sentir.
Días poco vividos,
noches de insomnio,
meses apagados
por una vida sin ti.

Ahora vuelvo a tenerte,
ambos mirándonos 
en un reflejo,
separados por un cristal
de apariencias,
por miedo a volver a perdernos. 

Limpiaré este cristal
como el más negro tintero,
romperé esta barrera
porque aquí dentro te quiero.
¡Sí! Como siempre ha sido,
yo actuando
y tú, aquí dentro contemplando.

No vuelvas a escapar,
llevo tiempo buscando,
desde esos días de niñez
en los que tú, mi alma,
todavía creías en mí.

Por mucho que cambie
nunca seré nada sin ti,
alma, ¡regresa!
no hago nada si no estás aquí.

7# (Ana dAM)

viernes, 20 de septiembre de 2013

Cara o cruz.

Cara o cruz


Tristes ojos cansados
que luchan por no mirar al suelo,
como cada cual soldado
que muere por cumplir deseos.
Deseos de vivir, morir de amor,
alimentarse de sabiduría sin mal sabor.
Comprar con sonrisas el buen color
de aquellas caras aplastadas por la cruz,
en un juego de zar sin pedir opinión,
en una habitación cerrada, sin ninguna luz.

Propongo que compréis 
con vuestros bolsillos llenos
aquella melodía que se llevó el viento,
esa felicidad que se escondió tras las piedras
porque la avaricia la maltrató sin piedad.

Cuando no quepa humo en las carteras,
 estén llenas hasta arriba,
si empieza a caer la tormenta
los billetes se empaparán de tristeza.
Cuando todo se os derrita
no podréis comprar
ni siquiera la esperanza que le hace bailar.
Porque baila bajo la lluvia
y levanta la mirada hacia arriba,
no tiene ningún peso 
que le haga arrastrar la cabeza.

Replica:
"Aunque nada sea perfecto
jamás elegiría otra vida,
aunque si digo la verdad
preferiría tener otra salida."

Hoy sales a la calle
con un céntimo e las manos
mientras su billete de cincuenta
se repite día a día, se multiplica en verano.

Tanta gente en el mundo
y tú tuviste esta mala suerte,
suerte u obligación
porque no pudiste hacer cara o cruz.

No reproches a ella
la mala suerte tuya
pues tu madre es la primera
que querría darte una fortuna.

Tristes ojos cansados 
que luchan por no mirar al suelo,
puedes estar vacío por fuera
pero te aseguro que rico eres por dentro.

7#(Ana del Amor Mart)

martes, 17 de septiembre de 2013

Sombras

Sombras

Nunca aprendió a amar,
jamás aceptó el creer.
Iluso él que deseó volar
y el miedo se apoderó de su ser.

Buscó su sombra en oscuridad
y luego la maltrató a luz del día.
Siempre se torturaba en soledad
cuando recordaba que la necesitaría.

Fue pobre en esas palabras
y demasiado rico en silencios.
Tiembla su esencia en cada mirada
que dirige al túnel de sus deseos.

Se repetían una y otra vez:
"Te quiero aquí, así y ahora..."
pero a la hora de querer,
ninguno se valora.

Desgraciado él que amaba,
desolada sombra que sentía...
Pero la poesía nunca acaba
y los recuerdos jamás se olvidan.

7# (Ana del Amor Mart)

jueves, 5 de septiembre de 2013

Que la música nos salve.

Que la música nos salve.













Encerrados, ahogándonos.
Poco espacio para tí,
tú que eres tan grande.

Caja de acero,
nosotros mínima fuerza...
tan poco espacio da dolor de cabeza.

Los acordes desafinados,
esos que rebotan contra las paredes,
no dejan salir a tu dulce melodía.
Ahora las sábanas disimulan
las caricias que un día
pudo darte la vida.

Si no conseguimos salir de aquí
nos congelaremos como nuestro pasado...
que intentando sustituirlo el presente ha fracasado.

¡Vuela ya! ¡Derrumba esta muralla
 llena de ilusos que no aprecian las miradas!
¡Demuestra que aquí eres tú la que manda!

La música se esconde para que aquellos que la buscan
sean capaces de hallarla.
No llores más,
todavía queda gente esperando a que salgas.

7# (Ana del Amor Mart.)


sábado, 31 de agosto de 2013

No somos nadie.

No somos nadie.
Ahora no somos nadie,
No queda nada de lo que fuimos en aquella habitación vacía y que permanece guardando el humo de nuestro ayer. Aquella moneda que compró todo lo que quisimos ser y que ahora queda encerrada por siempre en un monedero de piel desgastado por los golpes que nos dio el viento mezclado con las gotas de anís que caían de nuestros ojos por vernos a nosotros y no a nuestro reflejo atrapados en aquella botella de cristal. Esa que torturada sigue expuesta a las paredes de esa habitación junto a la moneda y a los gritos en el silencio que esconden aquellas paredes...
Porque fuimos,
ya no somos.
7# (Ana del Amor Mart.)

jueves, 29 de agosto de 2013

Habitación en ruinas.

Habitación en ruinas

Vacía estaba aquella habitación. En las paredes, emborronados, quedaron los arañazos que tantos pensamientos diseñaron. El suelo se rompía, se partía por la mitad. 
Mucha gente había estado aquí, quizás demasiadas personas. Nunca nadie se había ocupado de repararla, aunque en el fondo era ese su encargo. Ahora, me toca a mí. Como si de una casa de alquiler se tratara, como una cárcel rodeada de celdas y atrapada permanezco. Una habitación vacía, sucia, rota... es lo que me queda para vivir.
De repente, empiezo a moverme. De un lado a otro. Un terremoto y luego, un tsunami. Aquella habitación quedó inundada de lágrimas y golpes. Ya no tenía nada, me lo habían robado todo.
Poco a poco voy perdiendo el conocimiento, la razón de ser. De ser lo que era, soy o si alguna vez seré. Eran mis lágrimas y mi corazón, que sin darme cuenta dejé entrar a demasiados amigos, demasiados con mala intención.
7# (Ana del Amor Mart.)

miércoles, 28 de agosto de 2013

Tormenta de verano.

Tormenta de verano
















Se atormenta mi mente, con un inmenso ruido que no deja pasar al aire. Que no deja hueco en mi nariz, ojos y oídos taponados... incluso el tacto y el gusto, el gusto del vivir se habían petrificado. 
Todo era frío, frío de invierno. 
Pierdo los sentidos a la vez que escapa el sentido de la vida. Ese dolor de cabeza, esa oscuridad inmensa no puede habitar hoy aquí, hoy no. Porque a la vez que mi mente se atormenta me voy dando cuenta de que sólo es un día frío de verano. Pobre de mí, ni mis pies saben en dónde me hallo. Pobres gotas de lluvia, que con ruido las he comparado.
7# (Ana del Amor)